Ruddy Yáñez Villavicencio (33) se acogió a un proceso abreviado, acusado de violar y quitarle la vida al niño de nueve años, quien estaba desaparecido desde el viernes.
“El imputado solicitó acogerse a procedimiento abreviado aceptando la responsabilidad del delito, elementos que fueron valorados por la autoridad jurisdiccional que determinó la pena máxima”, informó el fiscal departamental de Santa Cruz, Róger Mariaca, según una nota institucional.
En Santa Fe de Yapacaní, del departamento de Santa Cruz, se llora la muerte de José Andrés. La familia estaba desesperada desde el pasado viernes, cuando el niño de nueve años desapareció tras salir de su colegio.
Los días pasaron en movilizaciones constantes por dar con el pequeño. La fe no se perdía, la familia esperaba encontrarlo en cualquier momento y llevarlo de vuelta a su hogar.
JOSÉ ANDRÉS
Como indicios se tenían imágenes de cámaras de seguridad que mostraban a José Andrés, subiendo a un mototaxi. Este vehículo resultó ser de Ruddy Yáñez Villavicencio, de 33 años; todo se desmoronó este miércoles, cuando el cuerpo del niño fue hallado enterrado en un lote baldío, donde también lo agredieron sexualmente.
Las investigaciones señalan que este hombre engañó al niño y le ofreció Bs 20 para que suba a su vehículo, para luego agredirlo sexualmente y asfixiarlo hasta quitarle la vida; hay indicios de que el pequeño trató de defenderse. Ruddy Yáñez Villavicencio quedó aprehendido y lo imputaron.
“Como Ministerio Público se colectaron las pruebas en contra del sujeto, como las declaraciones de testigos, la colección de imágenes de cámaras de seguridad donde se observa al hombre con el menor en una motocicleta, el examen médico legal realizado por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) que determinó como causa de la muerte asfixia mecánica por sofocación y agresión sexual”, dijo Mariaca.
El sindicado tenía antecedentes de abuso sexual y por otro por intento de violación. Hoy, tras violar y matar a un niño de nueve años, irá a la cárcel de máxima seguridad de Chonchocoro, para cumplir la pena de 30 años sin derecho a indulto.
Flores blancas rodearon este jueves el ataúd del mismo color en que reposan los restos del niño. La familia no lo cree; el pequeño se despedía de manera normal el viernes para ir a su colegio, y ese mismo día le quitaron la vida.