En su visita, DeSilva explicó que es mayoría las personas que deciden cuidarse de no ingerir alimentos con grasa, sin embargo, resaltó que el “monstruo” de la piel y la salud en general es la azúcar
Un elevado consumo de azúcares tiene una acción devastadora en el colágeno de la piel, provocando un envejecimiento con mayor rapidez en los seres humanos.
El azúcar provoca una reacción química denominada glicación ante el exceso de glucosa potenciando el deterioro a nivel celular, dañando la estructura de la piel, provocando la rigidez de las fibras de colágeno y elastina perdiendo así la firmeza y la elasticidad de la piel.
Así lo dio a conocer el doctor Derrick DeSilva, un médico interno con más de 30 años de ejercicio, que visitó la redacción de Listín Diario para dar pinceladas sobre un conversatorio que realizará hoy a las 6:30 en el Hotel Catalonia, donde se impartirán charlas sobre la epigenetica en la nutrición celular, el envejecimiento y cómo influye el uso de los celulares en la salud.
En su visita, DeSilva explicó que es mayoría las personas que deciden cuidarse de no ingerir alimentos con grasa, sin embargo, resaltó que el “monstruo” de la piel y la salud en general es la azúcar.
“Hay que comer bien, la gente siempre piensa que la grasa es el problema, pero no, porque el cerebro es 60% grasa, así que sino comes mucha grasa, el cerebro no funcionará bien; el verdadero problema es la azúcar”, dijo el galeno que se especializó en antienvejecimiento.
A pesar de que llegó a este diario para invitar al evento, adelantó algunos consejos para mantener la salud y el rejuvenecimiento en las personas.
El consumo de magnesio, calcio y vitaminas, es necesario para el reflejo de una buena salud, pero resaltó que el ejercicio es fundamental para un cuerpo agradecido a los 66 años.
SOBRE DERRICK DESILVA
El galeno ha estado atendiendo pacientes durante los últimos 31 años como médico especializado en Medicina Interna; se ha centrado en integrar la medicina oriental y occidental, brindando a sus pacientes «lo mejor de ambos mundos».
Durante los últimos años su pasión ha sido el campo de la medicina antienvejecimiento u óptima, como le gusta llamarla.
Sus cinco puntos de bienestar incluyen la comida que consumimos, las hormonas bioidénticas, nuestro nivel de actividad, los nutrientes que tomamos y, por supuesto, nuestra espiritualidad.
Sus logros incluyen haber recibido el Premio Alan Mintz a la Excelencia en Medicina Clínica de Gestión de Edad, el premio al Mejor Médico de Nueva Jersey y Nueva York otorgado por Castle Connolly durante los últimos 19 años consecutivos, y muchos más.
