Rusia aseguró que las Fuerzas Armadas de Ucrania están bombardeando instalaciones de infraestructura civil en el Donbás.
El representante adjunto de Rusia ante Naciones Unidas, Dimitri Polianski, ha insistido en que aquellos países de la comunidad internacional que envían armamento a Ucrania se convierten en cómplices de los crímenes y las muertes de niños que se dan en el Donbás ucraniano en el marco de la guerra.
Polianski ha intervenido este martes en una nueva reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas centrada en la situación de niños durante conflictos armados, como el caso de la guerra en Ucrania, iniciada hace ya casi cinco meses por orden del presidente de Rusia, Vladimir Putin.
«Las Fuerzas Armadas de Ucrania están bombardeando cínicamente instalaciones de infraestructura civil en el Donbás: guarderías, escuelas, instituciones médicas. Los niños mueren, incluso con armas proporcionadas por Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, República Checa, Eslovaquia, Países Bajos y otros países que se convierten en cómplices de delitos contra los niños», ha denunciado Polianski.
Según declaraciones del funcionario ruso recogidas por la agencia de noticias TASS, cerca de 250 civiles, incluidos 16 niños, han perdido la vida en territorio de la autoproclamada República Popular de Donetsk, mientras que otras casi 1.500, de las cuales 83 eran menores, han resultado heridas.
Asimismo, Polianski ha cifrado en 72 las instituciones médicas y 238 los espacioes educativos que han resultado dañados como consecuencia de los ataques de las tropas ucranianas.
Por otro lado, el representante ruso ante Naciones Unidas ha rechazado «categóricamente» que las autoridades rusas estén secuestrando menores ucranianos, una afirmación que asegura es «infundada».
Según Polianski, cerca de 2,5 millones de ucranianos han sido evacuados a Rusia, de los cuales algo más de 390.000 eran menores. «Todas estas personas se fueron a nuestro país voluntariamente, salvando su vida y la de sus hijos», ha aseverado.
Rusia distribuye pasaportes para arraigarse en Ucrania
Autoridades de ocupación rusa empezaron a otorgar pasaportes de su país en Melitópol, una ciudad del sureste de Ucrania conquistada por las fuerzas de Moscú.
Las autoridades de ocupación de la región de Zaporiyia, donde se sitúa Melitópol, quieren organizar un referéndum a finales de año para formalizar la anexión a Rusia.
Tras unas semanas de espera, Novitskaya deberá recibir sus nuevos documentos en una ceremonia en la cual sonará el himno ruso frente a un retrato de Vladimir Putin.
Esta distribución de pasaportes, que también tiene lugar en otras zonas ucranianas ocupadas, es parte de la estrategia de Moscú para implantarse en la región de manera irreversible.