Durante su intervención Choquehuanca enfatizó la importancia de la hermandad y la unidad, superando divisiones entre norte y sur.
“Desde el sur del continente emergerán vigorosos los guerreros del arcoíris para devolver la armonía al planeta. La wiphala es la codificación del arcoíris y los que levantan la wiphala somos los guerreros del arcoíris”, dijo Choquehuanca.
La llegada de un contingente de 65 militares venezolanos a territorio nacional causó sorpresa y molestia en legisladores de la oposición, evistas y exuniformados. Observaron que el gobierno de Luis Arce vulneró los parágrafos 21 y 22 del artículo 158 de la Constitución Política del Estado que dice que la ALP debe autorizar de manera excepcional el ingreso de militares extranjeros. Los uniformados arribaron el 30 de mayo a La Paz, en un vuelo de un avión Hércules desde Santa Cruz.
En ese marco, la segunda autoridad del país “brindó una inspiradora charla” a los 65 militares venezolanos en instalaciones de la Escuela Militar de Ingeniería en La Paz.
“El vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia, David Choquehuanca Céspedes, brindó una inspiradora charla dirigida a los oficiales del Instituto de Altos Estudios Nacionales de la República Bolivariana de Venezuela y a los oficiales de Altos Estudios Nacionales y Escuelas de Comando y Estado Mayor Naval. Este evento tuvo lugar en la Escuela Militar de Ingeniería de Irpavi, en la ciudad de La Paz”, se lee en un reporte de la página de Facebook de la Vicepresidencia.
Choquehuanca, en su discurso ante un auditorio lleno y con la presencia de los uniformados venezolanos, habló de la unidad, de poner fin al divisionismo y de su filosofía del vivir bien y que nadie se tiene que sentir dueño de nada y de nadie. Dijo que ya no quiere andar por el camino del desarrollo impuesto desde la Segunda Guerra Mundial.
“Estamos diciendo queremos volver al camino del equilibrio, queremos volver al camino de la verdad, ya no queremos caminar por ese camino que se llama desarrollo y nos han impuesto después de la Segunda Guerra Mundial, entonces nos convertiremos en piedra y después de 500 años volveremos a hablar”, dijo Choquehuanca.
En el evento los jefes militares otorgaron obsequios y reconocimientos a Choquehuanca, posaron con el puño izquierdo en alto para las fotos de la posteridad acompañados de gritos de vivas para Bolivia y Venezuela.
El arribo de militares extranjeros fue observado por legisladores de la oposición y evistas porque el Ejecutivo no comunicó ni pidió permiso para el ingreso de este contingente a Bolivia. El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, alegó que no fue necesario cumplir este mandato, ya que las milicias extranjeras llegaron al país a cumplir actividades académicas.
El 15 de mayo, Novillo y el embajador de Venezuela en Bolivia, César Trómpiz, se reunieron para coordinar el arribo.