El riesgo de una crisis energética radica en la falta de inversión en la extracción de hidrocarburos debido a los planes de transición a combustibles más limpios, señaló el ministro en el Foro Económico de Catar
“Si la economía comienza a reactivarse y tienes un invierno normal, creo que lo peor está por llegar”, afirmó Al Kaabi.
A continuación, el alto funcionario catarí puso en tela de juicio la propia transición energética y sus efectos.
“Si se habla de las energías renovables, se puede generar electricidad a partir de la eólica y la solar, pero no se pueden producir plásticos o cualquier cosa que haya en esta aula, maquillaje para la mujer o cremas. Aparte de generar electricidad, las renovables no resuelven el problema, se requiere una pertinente mezcla de energía, y ella no puede ser motivada solo por la política y los políticos”.
En su opinión, son “lindas palabras decir ‘transición energética’, pero si pones los pies en la tierra, no es alcanzable”.
Al Kaabi propuso a los líderes europeos elaborar “un plan adecuado”, sentarse a negociar con los productores y no “demonizar” a las compañías petroleras y proveedoras de gas, de tal forma que, bajo esas condiciones, se pueda encontrar “una solución sensata”.
“Existe la posibilidad de que para fin de año nos quedemos sin todo el gas de North Field East y North Field South (dos yacimientos gasíferos en fase inicial de explotación, ubicados en el lecho del golfo Pérsico, cerca de las costas cataríes), en términos de contratos a largo plazo”, dijo el miembro del Gabinete catarí. “Obviamente, hay una demanda muy grande“, explicó.
Su homólogo saudí, Abdulaziz bin Salman Al Saud, atribuyó los riesgos para la seguridad energética global a las “políticas de patear la lata”. También apuntó a una inversión insuficiente en la extracción de gas e ironizó sobre las fuentes de energía renovable: “Se habla de hidrógeno azul, verde, morado y rosa, pero en el análisis final: ¿quién será el comprador?”, se preguntó. Y añadió: “¿Cuál sería el precio del hidrógeno?”.