Un agónico tanto de Ronnie Fernández (50’ ST) cambió anoche el grito de “Fuera Beñat” por uno de júbilo, al conquistar el agónico triunfo de Bolívar 1-0 sobre Barcelona, en partido jugado en el estadio Hernando Siles y que correspondió a la cuarta fecha del grupo C de Copa Libertadores.
Con la victoria, la Academia dio un paso vital para asegurar con anticipación el pase a los octavos de final, a la espera del duelo Cerro Porteño vs. Palmeiras (18:00) de hoy.
Bolívar tomó la iniciativa desde los primeros pasajes de la contienda, buscando caminos para acceder al área ecuatoriana, pero las imprecisiones en los remates de media distancia y balones parados no dieron resultado.
Barcelona, por su parte, fue defensivo y recién encontró la primer ocasión real de peligro con el remate de Francisco Fydriszweski (21’ PT), que Carlos Lampe desvió.
Gabriel Villamil (25’ PT) inquietó la portería norte del recinto deportivo paceño, luego de que su remate de 25 metros impactó en el travesaño. El grito de gol quedó contenido en la garganta de los aficionados celestes.
El complemento fue un vaivén de emociones, con cambios que aplicaron mayores jugadas de peligro sobre ambos pórticos.
La desesperación en la Academia se tradujo en las ocasiones falladas, que generaron zozobra en las gradas que se tiñeron de celeste en su mayoría.
Cuando todo parecía ser una noche gris en filas celestes, un pase de Javier Uzeda y el toque de Ramiro Vaca acabó con la definición de Fernández ante la salida del meta Víctor Fernández que no pudo evitar el 1-0 decisivo.
La afición bolivarista pasó de exigir una renuncia a vitorear a sus jugadores.