El diablo se apoderó de cinco hombres en Quibdó, Colombia, que son acusados de violar, matar y de descuartizar a una mujer delante de su hijo.
Las autoridades detallaron que, la maldad y barbarie se cruzaron por el camino de una madre y su hijo de 16 años, cuando ambos transitaban por calles de Quibdó, capital del departamento del Chocó.
Dos sujetos los interceptaron y recriminaron por deambular en el sitio, pero no solo hicieron eso, los llevaron a una casa, violaron sexualmente y asesinaron a la mujer, de 36 años; descuartizándola después y enterrando los restos en un patio.
Así mismo, tres sujetos más, que estaban en la casa a donde llevaron a sus víctimas, participaron en la agresión. A la mujer la violaron en repetidas ocasiones por los cinco criminales; mientras que el menor fue abusado sexualmente por dos de los hombres.
Atroz muerte de una mujer a manos de varios hombres en Colombia
Madre e hijo fueron brutalmente golpeados por todos los presentes. Tras cesar los vejámenes sexuales; la fémina fue apuñalada múltiples veces con un arma blanca, las heridas le causaron la muerte.
Después de asesinarla, los delincuentes la descuartizaron y sepultaron el cuerpo, por partes, en el patio de la vivienda. Como si no hubieran cometido una brutalidad, los sujetos se durmieron, momento en que el adolescente aprovechó para escapar. Los hechos ocurrieron el pasado 4 de mayo.
Cabe señalar que además de lo antes descritos, los criminales robaron a sus víctimas 120,000 pesos y sus teléfonos celulares.
Cabe destacar que, el menor salió corriendo como pudo de aquella casa donde vivió un infierno y en donde miro como mataron a su madre. Tras ponerse a salvo. Pero no fue el único que evidenció el crimen, vecinos del inmueble también denunciaron que había ocurrido algo terrible dentro de ese lugar.
Así fue como la Policía Nacional de Colombia logró detener a: Luis Fernando Asprilla Palacios y Jesús David Mosquera Mena, quienes presuntamente forman parte del Grupo de Delincuencial Común Organizado Los Mexicanos, una de las bandas más sanguinarias de Choco, contra la cual la policía ha intensificado esfuerzos para desarticularla.