“Se estudiaron los combustibles con contenido de alcohol de 8%, 10%, 12% y 15%, y se hicieron los estudios en vehículos que vinieron de Santa Cruz, Cochabamba, acá (La Paz) también trajeron y los resultados fueron favorables”, indicó el experto a este periódico.

Explicó que los estudios mostraron un pequeño incremento en la potencia en par motor (fuerza que ejerce un motor sobre el eje de transmisión de potencia), una disminución de la emisión de gases de efecto invernadero y una reducción del consumo de combustibles.

Los estudios se retomaron el año pasado, tras un receso por la pandemia del COVID-19, en vehículos que fueron cedidos por concesionarias como Toyosa y Carmax, y en minibuses, los cuales mostraron resultados positivos.

“En todos los casos, los resultados se han repetido a los de 2018; o sea, la potencia incrementa, incrementa el par motor, el consumo de combustibles. Hasta el 20%, sigue manteniendo por debajo de la gasolina pura”, sostuvo.

Uso

El Decreto Supremo 3672, del 26 de septiembre de 2018, determina que los combustibles a ser comercializados en el país con contenido de etanol anhidro tendrán una proporción volumétrica de hasta 12% de dicho aditivo de origen vegetal.

En Bolivia, desde noviembre de 2018, se inició la comercialización de la Gasolina Súper Etanol 92 con la dosificación correspondiente y que, a la fecha, se mantiene vigente.

El martes, el diputado de Comunidad Ciudadana (CC) Alejandro Reyes remitió una petición de informe escrito al Ministerio de Hidrocarburos y Energías para que explique el incremento en la mezcla de la gasolina con alcohol “hasta un 20%”.

“A la fecha no se cuenta con un estudio técnico, por lo que se desconoce cómo afectará esta medida al parque automotor. No sabemos si vale la pena comprar esa gasolina al mismo o mayor precio que una gasolina convencional”, cuestionó el legislador.

Recomendación

Sánchez recomendó a la población no dejarse llevar por rumores sobre una supuesta afectación en el motor con el uso de etanol, ya que, en su criterio, mejora el rendimiento para el funcionamiento de los motorizados.

“Éste es un consejo de ingeniería. La gente no puede dejarse llevar por el concepto de octano, uno no compra octano, compra energía para mover su vehículo y la energía para mover su vehículo es la gasolina, no el octano”, afirmó Sánchez.

Añadió que existen otras empresas comercializadoras de vehículos que demandan una prueba de etanol en sus motorizados, por lo que recomendó a Yacimientos seguir con las pruebas de este nuevo carburante.