“Debe haber subvención, pero tampoco puede ser exagerado. Una subvención exagerada es cáncer para nuestra economía”, señaló en su programa dominical de radio.
“Debe haber subvención, pero tampoco puede ser exagerado. Una subvención exagerada es cáncer para nuestra economía”, señaló en su programa dominical de radio.
El líder del partido oficialista recordó que en el 2010, cuando estaba al mando del país, intentó eliminar la subvención de los combustibles y tras esto se desataron protestas de reclamo.
“Yo recuerdo que por unos días levanté la subvención, he sido muy atrevido. El pueblo protestó, entendí y retrocedí”, recordó Morales.
Sin embargo, el exmandatario relató que tras conocer el resultado de una encuesta, en el que dijo que ‘ganó’ (refiriéndose a popularidad), consideró que su política de eliminar la subvención “estaba bien”.
“Aunque después gané la encuesta, (por lo que pensé que) la política de Evo de acabar con la subvención estaba bien porque estaba creciendo la subvención a llegar a 1.000 millones de dólares, a 3.000 millones de dólares de subvención. Es harta plata, es una sangría para la economía boliviana. Hay que ver cómo eliminar, (pero) requiere mucho tiempo”, indicó este domingo.
En 2010, el “gasolinazo” de Morales generó caos y convulsión social. En ese entonces, la Confederación de Chóferes de Bolivia declaró paro ante el incremento del precio de la gasolina y del diésel dictado el Decreto Supremo 748, que incrementaba hasta un 83 por ciento el precio de los combustibles. Ante la protestas, la norma fue anulada.
