Visitó la fábrica de aeronaves en la ciudad de Ulán-Udé y a través del modelo virtual Mi-171A2 «sobrevoló» digitalmente la urbe
El presidente de Rusia, Vladímir Putin probó un simulador de vuelo en helicóptero Mi-171A2, como si se preparase para ir al frente de la guerra. El día de ayer martes 14 de marzo se sentó sentó frente a los controles, se puso los auriculares e hizo despegar la aeronave. El modelo de nave que utilizó Mi-171A2. A la par visitó una fábrica de aviones en la ciudad rusa de Ulán-Udé donde «sobrevoló» virtualmente la urbe. Los asistentes de sistema virtual colocaron al mandatario en diferentes horas día para que experimentara el viaje de vuelo completo.
Emitió un discurso sobre la economía del país
Durante este evento, Vladímir Putin visitó la planta que fabrica los aviones en su país. Aquí conoció los aparatos que se producen dentro y habló con los trabajadores. Aprovechó para emitir un discurso sobre la economía de su región y señaló que Rusia fortaleció ampliamente su soberanía en este rubro desde el año pasado.
«Rusia superó el año pasado un hito muy importante en su desarrollo. Este es el resultado más importante de 2022 […], incrementamos enormemente nuestra soberanía económica», declaró.
Según el mandatario, cuando Occidente impuso las sanciones contra Moscú, se esperaba que la región Euroasiática «se derrumbara en dos, tres semanas o un mes». Pues la expectativa era que las empresas «se detuvieran» y que el sistema financiero «colapsara». El dirigente ruso enfatizó que querían que Rusia detonara desde dentro y cayera. Sin embargo «esto no sucedió», enfatizó.
Además, dirigente ruso subrayó que «las bases fundamentales de la estabilidad del país euroasiático resultaron ser mucho más sólidas de lo que se pensaba». Entre otras cosas, Vladímir Putin también señaló que los problemas actuales a nivel internacional comenzaron tras el colapso de la Unión Soviética, ya que el orden mundial «fue creado después de la Segunda Guerra Mundial por los países que la ganaron […] en primer lugar, por E.U. y la URSS«.
Finalizó su discurso diciendo que Rusia resuelve en Ucrania el problema de la supervivencia de su Estado. Según él, para su gobierno no se trata solo de una tarea geopolítica, sino de mantener a flote su región y crear las condiciones adecuadas para su futuro. Quieren lo mejor para que el país se desarrolle adecuadamente para las futuras generaciones, además de «acercar la paz y la estabilidad» hay que «consolidar» la sociedad.
