Inicialmente, la meta es llegar al 3% del reciclaje para el año 2025. Solo en Santa Cruz de la Sierra se generan 1.826 toneladas cada día, la mayoría desde las tres ciudadelas
“Cada tonelada que llega al vertedero es una tonelada de error”, dijo Heiver Andrade, director de la Fundación Amigarse, sobre los residuos sólidos, en el programa Periodismo sin photoshop, de Maggy Talavera.
Bajo esta lógica, lo más recomendable es que desde cada hogar se genere la menor cantidad posible de basura, o que se recicle lo más que se pueda antes del destino final.
De acuerdo a los datos de la Empresa Municipal de Aseo Urbano (Emacruz), en Santa Cruz de la Sierra se generan 1.826 toneladas por día, especialmente en el Plan 3.000, la Villa Primero de Mayo y Pampa de la Isla.
De los residuos producidos en el municipio, 39% no son aprovechables, 1% son residuos especiales, y 1% peligrosos. Es decir que 41% no tiene potencial reciclable.
Sobre las razones para que el porcentaje de capacidad recicladora sea tan bajo, desde Emacruz aseguraron que se debe a la convergencia de varios factores, los más importantes son la ausencia de políticas públicas de los niveles del Estado, y mercados poco atractivos para inversión del sector privado. “La meta es llegar, por lo menos, al 3% para el 2025”, respondieron a través de un cuestionario.
Para Andrade, la economía circular llegó para quedarse, ya que no se trata solo de un problema del Municipio, sino de todos, considerando que no se hace una separación de residuos desde el origen.
“Hay que ver las cosas desde el punto de vista de la oportunidad, son tiempos de cambios exponenciales. Necesitamos nuevas políticas públicas, a partir de la mirada constructiva que motive a la empresa a mejorar. Deberíamos pensar que el ahorro que genera el recolector de base tendría que irse a equipamiento, centros de acopio y todo lo que necesita el recolector para incrementar los porcentajes, y así lo hacemos un proceso inclusivo”, agregó.
Según las cifras de Amigarse, existen 2.000 recolectores que viven a tiempo completo del reciclaje en la ciudad, “es decir, 2.000 empleos verdes que necesitan dignificarse”, apuntó.
Andrade calculó en 43 dólares el costo de gestión de una tonelada que llega al vertedero. y lo mínimo que recupera al mes un recolector es una tonelada y media. “Si eso se multiplica por los 2.000 recolectores, estos ahorran al municipio un millón y medio de dólares”, aseguró.