En una rueda de prensa conjunta, Nicolás Maduro y Ebrahim Raisi oficializaron el acuerdo que da inicio a “una amistad indestructible”. El mismo apunta a estrechar lazos “en todas las áreas” y, aunque no dieron mayores detalles, uno de los puntos más importantes está referido a la seguridad alimentaria y un desarrollo tecnológico para que Caracas produzca mayor cantidad de alimentos para controlar su crisis, suministrarle a Teherán y al resto de la región.
En una conferencia de prensa junto a su homólogo iraní, Ebrahim Raisi, en el palacio Sad Abad de Teherán, manifestó que ambos países tienen “grandes frentes de cooperación” y que es “un mapa verdaderamente asombroso”.
Ambos mandatarios coincidieron en que este es el inicio de “una amistad indestructible”, en una profundización de unas relaciones amistosas que datan desde los tiempos de Hugo Chávez al frente de la nación sudamericana y que se mantuvieron en la era de Maduro.
El jefe de Estado venezolano afirmó que esta alianza abarcará “todas las áreas”. “A nivel estratégico, del petróleo, del gas, las refinerías, la petroquímica, a nivel financiero, a nivel de defensa”, enumeró.
Por su parte, el mandatario iraní subrayó la importancia que tendrá reforzar este vínculo para hacerle frente al “imperialismo” de Estados Unidos. “La firma del documento de cooperación de 20 años es una muestra de la voluntad de las altas autoridades de ambos países para ampliar los lazos en diferentes áreas”, afirmó.
Raisi destacó la “perfecta resistencia” que Venezuela ha demostrado para sobrevivir a las “sanciones y amenazas del imperialismo”. También recordó que el pueblo iraní sufre el mismo trato hace ya “más de 40 años”.
Los detalles pormenorizados del acuerdo de cooperación no fueron difundidos por los dirigentes, pero uno de los puntos más trascendentes estaría direccionado a “consolidar la soberanía y la seguridad alimentaria” de ambas naciones.
En ese sentido, entre Caracas y Teherán trabajarán en el campo tecnológico para que los latinoamericanos produzcan mayor cantidad de alimentos para consumo interno y para exportar a Oriente Medio.
El estrecho lazo entre ambos países se acrecentó durante el mandato de Maduro, sobretodo en 2020, cuando Venezuela padecía escasez de gasolina y los asiáticos los socorrieron. En mayo último, la estatal Corporación Nacional de Ingeniería y Construcción de Petróleo de Irán consiguió un contrato por 110 millones de euros para reparar la refinaría más pequeña de Venezuela.
