Mantener buenas rutinas de sueño, alimentación y relacionarse con personas que nos hagan sentir queridos, es clave para sentirnos mejor
Controlar nuestros niveles de estrés es muy importante y afortunadamente, cada vez somos más conscientes de que vivir bajo esta tensión puede provocar problemas de salud, ansiedad e incluso depresión.
Por ello aquí hay 8 formas respaldadas por investigaciones para ayudarte a desestresar:
Practica mindfulness o meditación
La atención plena y la meditación son dos herramientas poderosas para lograr un estado mental más tranquilo y relajado. Es vital recordar sus beneficios en momentos de estrés.
Además de despejar la mente, aumentar la creatividad y restaurar la claridad de pensamiento, mejorarás la concentración y la autoconciencia, así como el equilibrio y la paz en su vida.
La atención plena es un enfoque de la vida que produce beneficios a largo plazo que cualquier persona, independientemente de su estilo de vida o profesión, puede aprovechar.
Estimula del nervio vago
La estimulación del nervio vago (ENV) no invasiva es una forma cada vez más popular de aliviar el estrés cotidiano. Desde la comodidad de tu hogar, puedes usar métodos no invasivos con un dispositivo que se coloca cómodamente en el cuello durante unos 20 minutos cada día.
Esta técnica no invasiva reduce la inflamación y ayuda a mover la energía a través de los órganos y músculos. Se ha descubierto que ENV es una herramienta poderosa que puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y equilibrar el sistema nervioso, permitiendo que el cuerpo se relaje de forma natural.
Conéctate con amigos y familiares
Otra forma útil de controlar el estrés es mantenerse en contacto con amigos y familiares. Hablar con alguien que conoces y en quien confías puede darte la oportunidad de descargar pensamientos o sentimientos que pueden estar pesando sobre ti.
Saber que cuentas con el apoyo de seres queridos importantes puede ayudarte a combatir la fatiga emocional asociada con el estrés y permitirte enfrentar los desafíos de la vida con tranquilidad y confianza.
Haz tiempo para ti
Cuando se usa junto con otras formas simples pero efectivas como el ejercicio, la meditación, escribir un diario y otras técnicas de relajación, tomarte un descanso y hacer algo que te haga sentir bien es un ingrediente importante para vivir una vida equilibrada.
Evita la comida chatarra come sano
Comer bien no solo aumenta tu energía, sino que te mantiene emocionalmente equilibrado. Tu cuerpo necesita una fuente saludable de nutrientes para seguir funcionando correctamente y cuando experimenta altos niveles de estrés, estos micronutrientes ayudan a mantener los diversos sistemas en equilibrio y contrarrestar los efectos negativos asociados con el estrés prolongado o intenso.
Mejora tu rutina de sueño
Dormir bien por la noche puede ayudar a marcar una gran diferencia en la forma en que te sientes y en cómo manejas el estrés. Puedes mantener un horario de sueño constante, limitar el consumo de cafeína, apagar los dispositivos electrónicos antes de acostarse o incluso intentar usar artículos de baño relajantes como aceites de lavanda o velas.
