El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, alertó que la sequía en Bolivia podría extenderse más allá del mes de marzo como estaba previsto inicialmente y actualmente afecta a 166 municipios.
«La sequía es uno efectos adversos más fuertes que ha vivido nuestro país, ha comenzado en el mes de mayo de 2022 y tiende esto a ampliarse más allá del mes de marzo, según estaba previsto por el Senamhi», informó el funcionario.
Hasta ahora, detalló Calvimontes, el fenómeno golpeó a 166 municipios y 5.407 comunidades, y dejó 486.045 familias afectadas y 175.799 familias damnificadas.
En total fueron afectadas 700.733 hectáreas.
Además pese a la época de lluvias no cayó la suficiente cantidad de agua para paliar la sequía y hay municipios donde no cayó ni una gota de agua, por ejemplo en Cuevo, Lagunillas, Boyuibe, Macharetí, Camiri y otros.
Ante esta situación, el Gobierno puso en marcha plan de atención inmediata para los municipios y comunidades afectadas que consiste en provisión de agua para consumo humano y animal, perforación y restauración de de pozos, construcción de atajados, y otras actividades.
Desde el Senamhi pronosticaron lluvias para esta semana y también para el mes de febrero, pero las precipitaciones no revertirán la sequía aunque paradójicamente en regiones como el trópico de Cochabamba, algunos municipio de Santa Cruz y Beni se han registrado inundaciones como consecuencia de la lluvia.
La producción de alimentos se vio afectada como consecuencia de la sequía, en Santa Cruz fundamentalmente soya y arroz; hortalizas y papa en los valles y papa en la zona del altiplano.
El precio del tubérculo, por ejemplo, en los mercados de La Paz escaló hasta Bs 100 la arroba y se estima que éste podría subir debido a la falta de lluvia.
El viceministro de Medio Ambiente, Magín Herrera, llamó a los gobiernos departamentales y municipales a trabajar en la atención de la sequía y recomendó la reconsideración de sus planes operativos anuales y presupuestos.