Ucrania espera ahora una «coalición» entre los aliados para alcanzar un contingente considerable
“Acojo con gran satisfacción el liderazgo del canciller alemán, Olaf Scholz, y de Alemania en el suministro de tanques Leopard 2 a Ucrania, en consulta con otros aliados y socios de la OTAN”, indicó Stoltenberg a través de su perfil oficial en Twitter.
El político noruego agregó que, “en un momento crítico de la guerra de Rusia, estos pueden ayudar a Ucrania a defenderse, ganar y prevalecer como nación independiente”.
Stoltenberg había dicho el pasado viernes, tras participar en una reunión de la cincuentena de países que apoyan a Ucrania en Ramstein (Alemania), que veía “urgente” el incremento de apoyo a Kiev para permitir que recupere el territorio ocupado ante las próximas ofensivas rusas.
Scholz anunció hoy la decisión de poner a disposición de Ucrania tanques de fabricación alemana del tipo Leopard 2.
Tras esta confirmación, España ha dicho que está dispuesta a la coordinación con los aliados en todo lo que sea necesario y que haga referencia al envío de los tanques de ese tipo que tiene en su posesión.
Por su parte, la presidencia de Ucrania expresó su agradecimiento a Alemania por la decisión de poner los tanques «Leopard2» a disposición de ese país y advirtió de que ese es «un primer paso».
«El primer paso está dado. Ucrania necesita muchos ‘Leopard‘», afirmó Andrej Zermak, jefe de oficina del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a través de su cuenta en Telegram.
Ucrania espera ahora una «coalición» entre los aliados para alcanzar un contingente considerable de estos blindados, que, según medios alemanes, podría situarse, sumando los de varios aliados, en un centenar.
La decisión alemana sigue a la solicitud formal de Polonia a Berlín para suministrar «Leopard» de su ejército a Ucrania y fue asimismo el Gobierno de Varsovia el que advirtió de su propósito de impulsar tal coalición.
Scholz, reacio en un principio a dar este paso, ha insistido reiteradamente en que toda decisión sobre esos tanques debía acordarse «en consenso» con los aliados occidentales de Ucrania, tanto europeos como con Estados Unidos.
