Nuevo semestre, el mismo Tigre: The Strongest perdió de local ante el Ceará y empieza a decir adiós a la Sudamericana

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El Tigre sigue hundido en un pozo que fue cavado por su clásico rival en la final del Apertura y que se ahonda por su división interna.

Nuevo semestre, mismos errores y el mismo juego improductivo. The Strongest no mejoró la imagen que dejó en la final del Apertura – que perdió 3-0 ante Bolívar- y cayó derrotado ante el Ceará brasileño en el Hernando Siiles de La Paz (1-2).

El equipo de Achumani repitió todo lo que hizo el primer semestre del año, sobre todo en condición de local. Tuvo el dominio del balón, pero nunca pudo ser un equipo verdaderamente ofensivo.

De hecho, como es costumbre en la ‘era Díaz’, solo tuvo en los centros, las pelotas paradas y los remates de larga distancia – siempre sin puntería- su única arma para tratar de complicar a una cerrada defensa visitante.

Ni el gol tempranero, que llegó a los cinco minutos tras una carambola y un remate de Ursino, pudo hacer que el Tigre se convierta en un equipo que se lleve por delante a su rival.

De hecho, daba la sensación que el Ceará había planteado un partido para sufriri atrás y buscar el arco rival en momentos justos. Por eso, Viscarra no tuvo trabajo en la primera etapa – aunque el VAR anuló un gol a los brasileños- y el Tigre nunca tuvo la ambición de ir por más.

Sus mejores momentos se vieron al epílogo del primer tiempo, aunque sin un solo remate que haga emocionar a los pocos hinchas que fueron al estadio.

El segundo tiempo tuvo casi la misma tónica. Los de Achumani tratando de presionar los primeros minutos, pero sin ideas para vulnerar una defensa cada vez más solida.

Los remates, siempre sin puntería, eran la única arma de un equipo que fue perdiendo la poca paciencia que tiene a medida que transcurrían los minutos.

Además, aproximadamente a la hora de encuentro se lesionó su capitán, Diego Wayar, y en su lugar entro Saúl Torres. El cambio inesperado trajo más de un momento de nerviosismo en el Tigre, que no supo buscar el segundo y tampoco mantener su ventaja inicial.

De hecho, los últimos 15 minutos fueron de total dominio brasileño. El Ceará, parecía, ahorró todas sus energías para jugar esos últimos minutos y no le pudo salir mejor, pues aprovechó dos horrores defensivos para dar vuelta el marcador.

Erick a los 76’ aprovechó un pase filtrado, que fue direccionado por Ursino en su afán de despejar, para encarar a Viscarra y marcar el empate.

Era injusto por donde se lo vea, pero el equipo de Brasil tuvo la jerarquía necesaria para, a partir del empate, aprovechar la pésima lectura de Ramondino, que hoy reemplazó a Cristian Díaz en la dirección técnica atigrada.

Y es que el argentino mandó a dos atacantes al campo, pero sacando un defensa y un volante mixto, lo que dejó a la defensa atigrada a merced del equipo brasileño.

De hecho, Viscarra en una ocasión y Triverio, en la línea, salvaron la caída del arco atigrado; sin embargo, el gol de la victoria visitante llegó en minutos de descuento.

Arrascaita perdió el balón en salida y posibilitó que Zé Roberto fusile a Viscarra para el 2-1.

Con la derrota, el Tigre sigue hundido en un pozo que fue cavado por su clásico rival en la final del Apertura y que se ahonda por su división interna.


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