El Ministro de Obras Públicas instruyó la búsqueda del gato en inmediaciones del aeropuerto de Tarija. La denuncia se hizo viral a nivel nacional e internacional.
Tras la denuncia de extravió del gato Tito hace cinco días atrás, en el aeropuerto Capitán Oriel Lea Plaza de la ciudad de Tarija, la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transporte (ATT) anunció el inicio de una investigación y una multa que podría ascender a 72.000 bolivianos para la empresa Boliviana de Aviación (BoA) por omitir el protocolo para el transporte de una mascota.
“De comprobarse algún tipo de incumplimiento, podría surgir una sanción que ascendería alrededor de 72mil bolivianos”, explicó el director de Transportes de la ATT Bolivia, Juan Manuel Chavarría, en una entrevista con Unitel.
Si bien la normativa de la ATT no tiene establecido el procedimiento a seguir en relación a este caso, Chavarría explicó que continuarán brindando todo el apoyo correspondiente en el marco de sus competencias.
“Este caso es muy sensible porque este gato más allá de una mascota, es un miembro de la familia de la pasajera”, aseveró. Por su parte, desde la empresa estatal BoA aseveraron que trabajan en dar con el paradero de la mascota.
Andre Iturre, propietaria de Tito, denunció a través de sus redes sociales que en el último vuelo Tarija-Santa Cruz del jueves el personal de la aeronave le negó la posibilidad de llevar con ella el canil transportador de mascotas en la cabina y que el traslado debía hacerse en la bodega del avión.
Cuando el avión arribó a Santa Cruz, tras un retraso de más de dos horas, la dueña recibió un canil vacío. Allí los encargados de la aerolínea finalmente le confesaron que extraviaron al gato en Tarija, muchas horas “antes de volar”, situación que no fue informada oportunamente.
El lunes, el ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, informó iniciaron un proceso a la aerolínea estatal en las entidades regulatorias para definir sanciones. Mientras tanto, se dispuso la distribución de alimento y agua en todo el perímetro del aeropuerto Capitán Oriel Lea Plaza para que la mascota pueda alimentarse.