Miles de personas están protestando en el sur del país por la destitución de Pedro Castillo, pidiendo al gobierno una convocatoria de elecciones presidenciales.
Autoridades confirmaron el fallecimiento de al menos siete personas durante enfrentamientos entre la Policía del país y los manifestantes en las protestas que se están llevando a cabo en el sur de Perú.
Los ciudadanos exigen la liberación del expresidente Pedro Castillo y la convocatoria de elecciones presidenciales, de acuerdo a información del gobierno regional de Apurímac.
Del total de muertes, cuatro han tenido lugar en el Departamento de Apurímac, mientras que otras dos han ocurrido en Arequipa. Además, se reportaron 34 personas heridas, de las cuales 28 son civiles y seis son policías.
Pedro Castillo, expresidente de Perú, se niega a entregar muestras de sangre y orina a la Fiscalía.
Manifestantes heridos tras detonación de dinamita
La gerencia regional de Salud de Arequipa reportó que 26 personas han resultado heridas durante las protestas, 16 son hombres y ocho son mujeres. Entre las muertes destacan el fallecimiento de un menor de edad, de 15 años, y el de un joven de 18 años.
Por su parte, la policía de Apurímac informó que dos efectivos están internados y con diagnóstico reservado en un hospital de la región, tras la detonación de dinamita contra una escuadra de efectivos policiales.
Miles de personas están protestando en el sur del país por la destitución de Pedro Castillo, pidiendo a su vez al nuevo gobierno una convocatoria de elecciones presidenciales.
Los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes ha llevado a la presidenta, Dina Boluarte, a declarar el estado de emergencia en tres regiones del país: Ica, Arequipa y Apurímac.
Castillo dice en una carta que está “secuestrado”
El expresidente peruano Pedro Castillo publicó este lunes una carta desde su centro de arresto, al que fue trasladado tras su fallido autogolpe de Estado, en la que escribió que considera estar «secuestrado» y tachó de «usurpadora» a la mandataria Dina Boluarte, que asumió la jefatura de Estado tras su destitución.
«Les hablo en el trance más difícil de mi gobierno, humillado, incomunicado, maltratado y secuestrado, pero así revestido de la confianza y lucha de ustedes, de la majestad del pueblo soberano, pero además infundido por el glorioso espíritu de nuestros ancestros», reza una carta firmada por él y publicada en su cuenta de Twitter.