Al menos cuatro personas murieron y más de un centenar resultaron heridas tras el colapso de un área de gradas durante una corrida de toros en el centro del país.
Dramáticas imágenes compartidas en redes sociales muestran una enorme porción del palcos de madera, lleno de espectadores, caer sobre la plaza de arena en el municipio de Espinal, departamento de Tolima.
«Al hospital han llegado más de 100 heridos. El personal médico no da abasto y se están evaluando dependiendo de las heridas», dijo Luis Fernando Vélez, director de la Defensa Civil del departamento.
Varias ambulancias fueron enviadas desde las ciudades cercanas de Ibagué y Melgar para atender a los heridos, que desbordaron la capacidad del hospital local.
Después del desplome del palco improvisado, decenas de personas gritan y huyen en pánico de la plaza, mientras un toro persigue a los espectadores confundidos.
El incidente ocurrió durante las tradicionales corralejas, en el marco de las ferias de San Pedro y San Pablo, en las que el público salta al ruedo para enfrentarse a los toros.
El 20 de enero de 1980 ocurrió la mayor tragedia reportada en un espectáculo de este tipo en Colombia cuando los palcos de tres pisos se vinieron abajo en Sincelejo y cayeron sobre cerca de 500 personas.
Tras ser informado del desplome de la plaza de toros, el presidente Iván Duque envió un mensaje a las víctimas y anunció una investigación.
«Sentimos la terrible tragedia registrada en El Espinal, durante las fiestas de San Pedro y San Juan, por desplome de palcos en una corraleja. Pediremos una investigación de los hechos; pronta recuperación a los heridos y solidaridad con las familias de las víctimas», indicó el presidente a través de redes sociales.
En su cuenta de Twitter, el presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, también se solidarizó con las víctimas e hizo un llamado a los alcaldes para no autorizar más eventos similares en el país.
«Le solicito a las alcaldías no autorizar más espectáculos con la muerte de personas o animales», escribió Petro.