Una estatua de bronce fue dedicada al fallecido líder cubano, que abrazó e impuso el comunismo de estilo soviético en Cuba desde 1959.
El presidente ruso Vladimir Putin y su par cubano Miguel Díaz-Canel se reunieron el martes (22.11.2022) en Moscú, donde ambos inauguraron un monumento a Fidel Castro y saludaron la “tradicional amistad” entre sus naciones, afectadas por las sanciones occidentales.
Un vídeo publicado en la página web del Kremlin mostraba a Putin y al jefe de Estado cubano, pronunciando discursos mientras guardias militares rusos flanqueaban una estatua de bronce de Castro.
El fallecido Castro abrazó el comunismo de estilo soviético después de la revolución que en 1959 expulsó al dictador Fulgencio Batista del poder.
Las sanciones occidentales
En un discurso, Putin subrayó la historia de desafío de Castro, alabando su “defensa desinteresada de la soberanía de su país natal” y estableció un paralelismo con las sanciones occidentales impuestas a Rusia por su campaña militar en Ucrania.
“La Unión Soviética y Rusia siempre han apoyado al pueblo cubano en su lucha por la independencia, la soberanía. Siempre nos hemos opuesto a todo tipo de restricciones, embargos, bloqueos, etc. Siempre hemos apoyado a Cuba en la internacional y vemos que Cuba adopta la misma posición hacia Rusia”, dijo Putin.
Otros altos funcionarios rusos se expresaron en términos similares en sus reuniones con Díaz-Canel, que llegó a Moscú el sábado.
Según la lectura de la Duma Estatal, Díaz-Canel afirmó el martes que “Rusia siempre puede contar con Cuba” y condenó las sanciones estadounidenses contra Moscú como “coercitivas” e “injustas”.
Díaz-Canel de gira
Díaz-Canel comenzó su visita al extranjero el pasado miércoles en Argelia, donde negoció el apoyo al sector energético cubano, incluyendo la compra de petróleo y la donación de una planta de energía solar. Está previsto que siga viajando a Turquía y China.
