El tercer auto que fue incautado, con placa 3582 PRS, no figura en los registros del RUAT, por lo que se refuerza la idea de que se trataría de un vehículo indocumentado.
El sábado, funcionarios y militares de la Unidad de Control Aduanero (UCA) identificaron a estos tres vehículos «chutos» en la acera oeste del penal de San Sebastián varones. Producto de ello y previa denuncia, incautó dos motorizados; mientras que el tercero, conducido por un presunto suboficial, se dio a la fuga.
“Eran pertenecientes a tres policías. Uno se ha dado a la fuga, atropelló a un personal de la Aduana”, reportó uno de los militares de la UCA.
VIDEO
En un video al que tuvo acceso OPINIÓN, se observa que un militar de la UCA increpa al presunto suboficial por intentar escaparse, algo que finalmente consiguió.
“Por favor, la llave, mi suboficial”, le dice el militar. En respuesta, el supuesto policía le pregunta: “¿Me va a ayudar?”. Luego, el efectivo de la UCA señala: “No, mi suboficial. Está con denuncia su autito”.
RUAT
OPINIÓN verificó que el motorizado que conducía el presunto efectivo policial que se dio a la fuga, con placa 2487 SAU, tiene radicatoria en Santa Cruz.
Se trata de un automóvil Toyota, color plomo, modelo 2008, de uso particular, según se visualiza en el RUAT. De acuerdo con este registro, el motorizado tiene una deuda de 200 bolivianos, por concepto del impuesto municipal de vehículos automotores terrestres, correspondiente a la gestión 2021.
Entre tanto, el motorizado con placa 5655 KKG, uno de los dos que fue incautado, también tiene radicatoria en la ciudad de Santa Cruz, según el RUAT. La vagoneta, de marca Peugeot, color negro y modelo 2022 de uso particular, fue trasladada a instalaciones de la Aduana, tras el operativo.
Lo que llama la atención es que el otro motorizado que fue incautado, con placa 3582 PRS, no figura en los registros del RUAT, por lo que se presume que se trataría de un auto indocumentado o “chuto”.
Recientemente y producto de operativos realizados a nivel nacional, la Aduana Nacional comisó 269 vehículos de contrabando, con modificaciones en el chasis o con placas clonadas, con un valor de 37,3 millones de bolivianos.
Uno de los dos motorizados “chutos” y con denuncia de robo es llevado a instalaciones de la Aduana. CORTESÍA
