En Bolivia 4 adolescentes se embarazan cada hora. Se estima que el 20% de las jóvenes llegan a los 18 años con al menos un embarazo.
Respecto a los totales, el Instituto Nacional de estadística proyecta una población femenina en el departamento de Tarija entre 12 y 18 años de 38.127 personas, por lo que el 1,68% de ellas quedaron embarazadas solo en los primeros siete meses del año. Las proyecciones indican que casi el 20 por ciento de las adolescentes llegará a los 18 años con al menos un embarazo.
Total de embarazos
Porcentualmente, los municipios con más gestantes en ese grupo etario -respecto a la totalidad de embarazadas de todas las edades en esa época- son San Lorenzo, Entre Ríos y Yunchará con un 22,3 por ciento, 19,9% y 18,8%, respectivamente, detallan los datos proporcionados a El País por el responsable de la Unidad de Prevención de la Secretaría de la Mujer y Familia en Tarija, Samuel Fernández.
En el caso de Cercado, durante los primeros siete meses de la gestión 2022, se registraron 240 embarazos adolescentes, que significa el 6,6 por ciento del total de embarazos registrados en el periodo, cifra que se encuentra por debajo de la media departamental que es 9,7%.
Impacto El 1,68% de las 37.000 adolescentes de entre 12 y 18 años en Tarija quedaron embarazadas en el primer semestre de 202
Fernández destacó que el municipio de Cercado presenta una reducción en el índice de embarazo adolescente respecto al total de embarazos, tomando en cuenta que en 2019 se tenía 11% de gestantes entre 12 a 18 años, 9% en 2020, 7.5% en 2021 y 6,6% de enero a julio de 2022. A nivel departamental, el índice de embarazo adolescente también se ha reducido de 15.7% en 2018 a 9.7% hasta julio de la presente gestión.
A nivel nacional, en la gestión 2021, el SNIS estableció que son más de 38mil casos de embarazos adolescentes, lo que supone 105 casos por día y 4 embarazos por hora.
Plan municipal de prevención de embarazos
Con la finalidad de reducir el índice de embarazos adolescentes en la ciudad de Tarija y la provincia Cercado, la Alcaldía -con el apoyo de más de 30 instituciones y redes juveniles- puso en marcha el Plan Municipal de Prevención de Embarazos en Menores de Edad 2022-2025.
Fernández explicó que dentro del Plan y en coordinación de los aliados estratégicos que forman parte del comité municipal de prevención de embarazos están contemplando acciones de cultura preventiva a través de la difusión masiva de información respecto a derechos sexuales y derechos reproductivos.
“Como comité y como Municipio nuestro objetivo es reducir ese número de 240 niñas embarazadas a menos, en ese sentido estamos trabajando bajo la normativa municipal 179 de prevención de embarazos adolescentes para realizar planes y programas”, mencionó.
Campañas de prevención en unidades educativas
El municipio, junto a instituciones como el Cies, la Dirección Distrital de Educación, el Sedeges, la Universidad y los Centros AIDAJ entre otras, viene desarrollando talleres, charlas y una serie de actividades como ferias educativas y de salud para evitar que se registren más casos de embarazos adolescentes en la ciudad de Tarija.
En coordinación con las juntas vecinales, junta de padres de familia y directores de las 170 unidades educativas de Cercado -de acuerdo a Samuel Fernández- desarrollan talleres de capacitación en temas de violencia intrafamiliar, bullying, prevención de embarazos, ciberbullying, entre otros.
También se ha implementado el Sistema de información de defensorías en la Secretaría de la Mujer, en las cinco defensorías del municipio. Se prevé fortalecer los centros de Atención Integral Diferenciada para Adolescentes y Jóvenes (AIDAJ).
Más del 50% de embarazos no fueron planificados
El Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), organismo dedicado a la salud sexual y reproductiva, da cuenta que casi la mitad de todos los embarazos en el mundo, un total de 121 millones, son no intencionales.
En Bolivia, la cifra es mayor, 50.5%, es decir, más de la mitad de los embarazos no fueron planificados, lo que limitó a las mujeres el ejercicio pleno de sus derechos reproductivos, de acuerdo a la información obtenida en la Encuesta de Demografía y Salud (EDSA) 2016.
La falta de planificación familiar implica muchas veces el fracaso de la pareja en conjunto e individualmente, ya que los progenitores deben resignar estudios o trabajos para atender al nuevo miembro, generando así una desigualdad de entrada con otras familias planificadas.