Dirigentes cruceños comprarán una cámara hipobárica para contrarrestar los efectos de la altitud en el fútbol boliviano. Para el médico Ivo Eterovic, esa opción “es tremendamente complicada”.
“Nosotros tenemos que adaptarnos y dejar de llorar”. Esa fue la conclusión de la reunión de dirigentes de cuatro clubes cruceños, el miércoles de esta semana. Ese día se definió “hacer la pollita (poner cuota)” para adquirir una cámara hipobárica para contrarrestar los efectos de la altura en los partidos de la División Profesional de fútbol.
Para Ivo Eterovic, expresidente de la comisión antidopaje de la Federación Boliviana de Fútbol, esa opción “es tremendamente complicada”.
Directivos de Guabirá, Oriente Petrolero, Blooming y Royal Pari concluyeron que “la única forma de contrarrestar la altura para los jugadores -y no sentir tanto las subidas y bajadas- es con la cámara hiperbárica”, explicó Rafael Paz, presidente del club azucarero, quien precisó que “nos estamos poniendo de acuerdo entre los cuatro clubes para hacer la pollita, porque es caro”.
Según los cálculos de Paz, la compra y la implementación de la cámara alcanzará los 300 mil dólares. Buscan que funcione desde noviembre, aproximadamente. “En esa máquina pueden entrar ocho personas. Puede haber equipos para hacer ejercicios ahí. Se puede ver qué jugador responde mejor en la altura. Me parece que le quita un poco la oxigenación. Tiene que ser dos o tres días antes de viajar, de dos o tres horas. El jugador tiene que hacer un sacrificio también, pero es la única forma para que se disminuya el efecto de la altura”, detalló el cruceño, entrevistado por Sólo fútbol.
Pero para el experto Eterovic, “no es cuestión de meterlos un ratito”. Desarrolló: “Tienen que estar siete u ocho horas en cada cámara durante siete o 14 días. Lo ideal es 21 días para adaptarse a la altura. Esa cámara la utilizan los pilotos de combate. Esas no son cámaras, son cuartos hipobáricos”.
Eterovic advirtió que “no solamente es cuestión de meterlos (a los jugadores) en una cámara y dormir, se tiene que controlar permanentemente al deportista, el tema de su saturación de oxígeno. Tienen que tener gente experta y tener mucho material con equipos para ver la saturación de oxígeno y demás”. Por eso, calculó que los costos anuales de operación y de mantenimiento alcanzarán “por lo menos unos 450 mil dólares. Es tremendamente complicado”.
Ilustró: “Las cámaras funcionan en relación a la presión atmosférica. La hiperbárica es tres veces la presión atmosférica. Si la presión atmosférica es 760, están subiendo a 2.000 y más milibares la presión atmosférica. En la hipobárica, la bajas; si estás en 490 en La Paz, la estás bajando a 80 con la cámara. Se debe controlar la saturación”.
“Dejar de llorar”
“De qué sirve que traigamos jugadores de nivel si cuando vamos a la altura nos es difícil. No hay por qué engañarse. Nosotros tenemos que adaptarnos y dejar de llorar. Ellos viven en la altura y tienen que aprovechar (…). Hay que jugar el fútbol donde nos toca. Tenemos un país diverso y tenemos que jugar donde nos corresponda”, resaltó Paz.
¿Cuándo llegará al país?
Paz explicó que el plan es de cuatro clubes, pero esperarán a que Real Santa Cruz también se sume. “La cámara hipobárica puede llegar al país en noviembre o diciembre. Lo ideal es que esté para este campeonato, para diciembre puede ser para las finales porque hay que hacer la pieza y todo. La próxima semana nos explicarán si la cámara tiene que ir en una habitación. Si no es complicado, puede estar aquí en tres meses. El lunes nos contactaremos con gente de varios países para saber en qué tiempo podemos tener la cámara aquí”, destacó el directivo Paz.
Cámara hipobárica
¿Cómo es? • Consiste en un habitáculo conectado a una motobomba, capaz de extraer el aire existente en el interior y crear así una situación de vacío, teniendo capacidad de reducir la presión barométrica interior total.
Ideal • La cámara hipobárica es idónea para reproducir las condiciones de presión barométrica total y parcial de los gases componentes del aire, que existen a distintos niveles de altitud en la atmósfera, siendo un instrumento ideal para someter a los aviadores a distintas prácticas de entrenamiento fisiológico, según la Sociedad Española de Medicina Aeroespacial.
Eterovic • Ivo Eterovic explicó que en España se trabajó mejor en el tema.