“Ahora hay un tope de edad”, anunció el presidente Luis Arce, quien anunció que el proyecto de ley sobre esta medida será enviado a la Asamblea Legislativa para que la considere.
El Gobierno considera que después de los 65 años los trabajadores “ya no aportan”, por lo tanto, considera que esa edad debe ser el límite para la jubilación. En ese sentido, anunció la redacción de una ley que será puesta en consideración de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
“Se ha establecido un límite máximo de acuerdo a la Ley General del Trabajo, un tope de 65 años que el trabajador tiene que tener para trabajar y por encima de esos 65 años nosotros consideramos que ya no tiene un aporte al sector que corresponde y debería jubilarse”, señaló el presidente Luis Arce la noche de este miércoles.
“Por lo tanto, ahora hay un tope de edad que también será enviado en proyecto de ley a la Asamblea Legislativa para que esta la considere”, añadió.
La medida fue acordada en la reunión que Arce sostuvo con la dirigencia de la Central Obrera Boliviana (COB) para definir el incremento salarial.
La Ley General de Trabajo establece que “los empleados fiscales, municipales, de entidades autárquicas y de empresas particulares en general, que cumpliesen 65 años de edad, están obligados al retiro forzoso”.
No obstante, precisa que esa medida se puede revertir “salvo en aquellos casos en que la entidad o patrono de quien dependan, acuerden su permanencia por un lapso no mayor de tres años más”.
En varios sectores algunos trabajadores optan por continuar con sus labores. Incluso se menciona que se ven obligados a trabajar pese que ya cumplieron con sus aportes debido a la baja renta que perciben.
Se esperan más detalles sobre la medida anunciada por el presidente Arce, que debe ser presentada en el Legislativo.